Decisiones

CUANDO USTEDES, QUERIDOS LECTORES, tengan esta edición de Esquire en sus manos, Alfonso Herrera, el actor mexicano que nos acompaña en nuestra portada, habrá celebrado 40 años de vida. De hecho, el evento que develará a esta nueva publicación en la Ciudad de México, justo un día después de su cumpleaños, servirá como una manera “no buscada” de festejárselo. Poncho, como le conocemos casi todos los que hemos seguido su carrera, quería ser aviador. “Cuando era niño, soñaba con volar”, le cuenta a Almudena Barragán, en entrevista para este número, “... pero se atravesó lo de la interpretación y ya no sucedió lo de ser piloto”. Se “atravesaron” la actuación y la música, y con ellas la fama que le trajo proyectos como Amarte duele Rebelde, responsables de convertirlo en ídolo de millones, no solo en México y yen Latinoamérica, sino en los lugares más remotos. Y aunque tal vez lo previsible habría sido seguir ese camino, Alfonso supo esquivar la fama y maniobró el timón de su vida como sus convicciones e instinto le guiaron, escogiendo oportunidades, descartando otras tantas, y consolidando una carrera como actor que le ha ganado el respeto del público y de la industria. Por eso, al verlo el día de la sesión de fotos para la portada, me hace mucho sentido cuando el Alfonso de hoy, con su sonrisa serena de siempre, me cuenta que ha llegado en bicicleta y en ella se irá al terminar, pues es el medio de transporte que más le gusta usar para moverse en la ciudad. Si algún día te lo cruzas, salúdalo, seguro te responderá con una sonrisa. Disfruten mucho de esta edición de septiembre. ¡Un abrazo!