En palabras de Grey

Estas frases del libro autobiográfico de Jennifer, revelan mucho sobre su vida.

• Sobre Baile caliente: “Después de Dirty Dancing me convertí en el dulce corazón estadounidense... (pero) al parecer, no sobraban trabajos para actrices que se veían como yo”.

• Sobre su rinoplastia: “El problema, que en realidad no lo era para mí, pero que parecía serlo para otros, terminó siendo mío y era tan claro como mi nariz... De la noche a la mañana perdí mi identidad y mi carrera”. Y es que durante sus primeros años en Hollywood, Grey, de origen judío, se afinó la nariz conservando su característica protuberancia, con lo cual empezó a obtener más papeles, pero mientras filmaba Wind, el director de fotografía notó que un fragmento de cartílago sobresalía de la punta, así que se sometió a una segunda operación para arreglarlo; sin embargo, el cirujano cambió su fisonomía al punto que el público ya no la reconocía. Para ella fue el momento más duro, solitario y confuso de su vida. Fue devastador ser incomprendida durante décadas, pues le fue difícil encontrar trabajo y en esa situación tocó fondo.

• Sobre su relación con Matthew Broderick: “Éramos demasiado jóvenes. Y no pasa una sola semana sin que piense en el tema, las familias, Matthew. Es algo que está en mí. Es parte de mi mapa topográfico y del paisaje de mi vida”.

• Sobre su primera cita a ciegas con Johnny Depp: “Cenamos, hablamos, tomamos Jack Daniels, nos reímos... Él era ridículamente hermoso y sorpresivamente abierto, divertido y dulce”.