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UNA MUJER NADA ORDINARIA

POR MÓNICA ISABEL PÉREZ

Rosamund Pike nunca ha permanecido en su zona de confort, la actriz exploró caminos que, aunque fueron bastante difíciles, la han llevado a una vida profesional y personal en plenitud y éxito.

Rosamund Pike despegó en Hollywood como ‘chica Bond’ y pudo haber vivido del estereotipo, pero no lo hizo. Apostó por el camino difícil: mostrar en pantalla a mujeres tan complejas como ella. Y gracias a eso está en su mejor momento y a punto de estrenar la esperadísima serie The Wheel of Time.

Desde las orillas del lago Como, en la región italiana de Lombardía, puede disfrutarse de una de las vistas más hermosas a la cordillera de los Alpes, un paisaje que Leonardo Da Vinci inmortalizó como fondo de la más famosa de sus obras: “La Mona Lisa”. Fue en ese escenario, tras cancelar una cena con George Clooney, donde el cineasta Joe Wright (director de filmes como Pride & Prejudice, Anna Karenina y Darkest Hour) decidió abrir la clásica caja del diamante para pedirle matrimonio a su novia Rosamund. Ella dijo que sí. Todo parecía un sueño: su novio ahora era su prometido, uno de los paisajes más bellos del mundo era su testigo y, casi de inmediato, la pareja ya tenía casa y planes para una gran boda.

Rosamund, quien tiene muy buen sentido del humor, decidió acompañar las invitaciones con una fotografía de ella y Wright en un jacuzzi. Su intención era provocar risas entre sus conocidos, pero aquello se tornó en una pesadilla: el cineasta se enojó tanto por esa broma llevada a cabo ‘sin su consentimiento’, que canceló la boda, así, sin explicación alguna.

Por supuesto, causó suspicacia que Wright tomara una decisión tan radical por un hecho tan absurdo y pronto se empezó a especular que, quizá, no estaba dispuesto a tomar un compromiso tan importante, ya que días antes había sido visto con otras mujeres en diversos bares. Rosamund se limitó a decir que, pese a todo, él le seguía pareciendo un hombre extraordinario. “Nunca fue claro al respecto, lo cual hizo todo aún más confuso”, confesó la actriz a The Guardian. Además, aseguró que todas aquellas historias de su exprometido pasando el rato con bailarinas exóticas eran falsas. “Eso no suena a él”.

Con el corazón destrozado tuvo que empacar todas sus cosas y volver a casa de su madre, que se encargó de llamar a todos los invitados para darles la triste noticia. Y luego, para reponerse, la joven actriz de entonces 29 años trató de ver el lado bueno del asunto. “Al menos mi abuela ya no espera que siga el camino tradicional”, dijo a una revista de moda sobre ‘los pros’ de la tragedia que le significó esa separación.

SUERTE EN EL JUEGO, ¿DESAFORTUNADA EN EL AMOR?

Tras lo sucedido muchas personas se sintieron tentadas a usar ese viejo dicho para describir lo que Rosamund estaba viviendo. Es un cliché moderno pensar que una mujer sólo puede ser exitosa en un área de su vida. Pronto se dio a conocer que esa no había sido su única decepción amorosa. Antes de ser novia de Wright tuvo una relación de dos años con el actor Simon Woods. Ambos estaban en la universidad y parecían la clásica pareja idílica. Pero Woods tuvo que enfrentar una verdad sobre sí mismo y contársela a su novia, aunque eso le rompiera el corazón. Le confesó que era homosexual y, aunque el rompimiento causó una gran tristeza a Rosamund, lo comprendió y ambos siguen siendo amigos. “Cuando alguien te lastima quizá te toma un tiempo superarlo, a veces años. Pero, aunque no lo digo todo el tiempo, soy muy feliz de haber compartido tiempo con las parejas que he tenido”, dijo a The Sunday Times. Con Simon, quien desde 2012 está casado con el diseñador de moda y exdirector creativo de Burberry, Christopher Bailey, incluso compartió set en Pride & Prejudice.

Con esas historias precediendo su vida amorosa, sobre la que ella es bastante abierta ante la prensa y sus seguidores, era fácil reforzar el estereotipo de que mientras mejor fuera su carrera, más sola estaría. Rosamund hizo oídos sordos de todas esas ideas. Después de todo es una experta evadiendo el qué dirán. Así le pasó cuando en la audición para ser la elegante y sexy villana Miranda Frost en la saga de James Bond, le pidieron que se quitara la ropa para verla en lencería. Ella se negó. Tenía 21 años y una carrera que comenzar, pero no cedió a la presión que otras jóvenes podrían haber sentido en un momento así. Y se quedó con el papel. Tampoco le ha importado su edad y lo juicioso que puede ponerse Hollywood al respecto. Hoy día ella tiene 42 años y hace poco la vimos desfilar en la alfombra roja del Festival de Cannes, como siempre imaginamos a una estrella de cine: impecable y etérea. Rosamund no sólo causó furor con su espectacular vestido de Dior, sino que honró su promesa: actuar y mantenerse vigente sin importar cuántas canas y arrugas aparezcan. Y aunque también dejó claro que estar casada o soltera jamás le ha quitado el sueño, sí encontró el amor, pero, como todo en su vida, su historia no es convencional.

LA CIENCIA DE ENCONTRAR A ‘LA OTRA MITAD’

Pike tiene una mente inquieta desde niña. Nacida en 1979 en Londres, siempre se sintió atraída por el conocimiento integral. Sus padres eran cantantes de ópera y viajaban de manera constante, fue así que, además de inglés, aprendió a hablar francés y alemán. Siendo la música tan importante en su vida también tomó clases de piano y violoncelo, y cuando tuvo que elegir una carrera decidió estudiar letras inglesas, que cursó en la prestigiosa Universidad de Oxford.

Hace poco que vivió en Praga a causa de la serie The Wheel of Time (la saga de fantasía épica de Robert Jordan que promete conseguir un fandom similar al de Game of Thrones), trabajó en aprender checo sin dejar de lado sus clases de mandarín. Le encanta la ciencia, y para interpretar a Marie Curie en la cinta Radioactive, que siguió al éxito de I Care a Lot, por la que este año ganó un Globo de Oro como Mejor actriz de comedia o musical, tomó clases de química.

Con una curiosidad insaciable como la suya, era natural que como compañero de vida eligiera a alguien con una mente igual de estimulante. El primer encuentro con quien se convertiría en su ‘otra mitad’, como ella lo llama, ocurrió en una fiesta. Y, tras el chispaso, Rosamund se encontró de nuevo con juicios que no le importaron. Esta vez porque el hombre en cuestión es 18 años mayor que ella.

Robie Uniacke no es la típica pareja de una estrella de Hollywood, donde predominan los romances entre colegas. Uniacke es matemático y empresario. Un hombre dos veces divorciado que, cuando conoció a su actual pareja, ya tenía

“Me divierto al dar vida a mujeres que, a su vez, disfrutan interpretar distintos papeles en su historia, en especial cuando son irónicas o satíricas”.

cuatro hijos y una larga historia que contar que incluye un fraude fiscal y un problema de adicción a la heroína que, por fortuna, ha resuelto. A sus 60 años y tras varios tropiezos ha conseguido la plenitud con Rosamund, que comparte con él sus ganas de aprender todo acerca de todo. Decidieron no casarse, lo que no significa que no lo vayan a hacer en algún momento, pero no por eso se negaron a construir una familia. Ambos aseguran que para tener una relación exitosa, separarse a ratos y no necesitarse es un asunto clave. “La gente tiene expectativas ridículas sobre una pareja. Parece que queremos que una sola persona cubra todas nuestras necesidades y eso es imposible o, si es posible, no es alcanzable para todos. Creo que separarse un poco es la clave... Por supuesto es la persona con la que quiero volver a casa, pero no siempre tengo que estar

pegada a él; es bueno que al salir conozcamos gente nueva”, confesó Pike a Spectrum.

La fórmula les ha funcionado. En 2012 nació su hijo Solo y dos años después el pequeño Atom. Juntos disfrutan jugar con legos y practicar mandarín, ya que la pasión de Uniacke por la cultura china se le contagió a toda la familia. Desde que se conocieron en 2009, Uniacke y Pike han sido un ejemplo de cómo funcionan las conexiones profundas. Se recomiendan libros, aman viajar, apoyan causas feministas y, tal vez, solamente él entiende el porqué Rosamund entierra sus premios en el jardín, como hizo con su recién ganado Globo de Oro. Le encanta imaginar que, años después de su muerte, los nuevos propietarios de su casa en Inglaterra los encontrarán algún día “y serán reliquias”, dijo a la BBC.

UNA MUJER QUE ES MUCHAS MUJERES

Pronto, a Rosamund todo el mundo la conocerá como Moiraine Damodred, una mujer críptica cuya búsqueda incansable por “el Dragón renacido” es uno de los grandes detonantes de todo lo que ocurre en la saga de The Wheel of Time, la serie que ya se anuncia como todo un fenómeno televisivo. Ahora que se ha revelado la primera imagen de la actriz caracterizada como Moiraine utilizando una larga capa azul purpúreo, apenas podemos recordar que la primera vez que su nombre dio de qué hablar fue cuando apareció en la pantalla grande como ‘chica Bond’. “Pudo mantenerse haciendo de la rubia guapa y objeto de deseo. Pudo ser algo muy fácil para ella, pero en lugar de eso comenzó a tomar papeles cada vez más retadores”, contó Marjane Satrapi, directora de Radioactive a The New York Times sobre cómo fue trabajar con Pike. Y es verdad. La actriz garantiza con sus actuaciones que habrá un tratamiento profundo sobre el ser mujer, con todas las dificultades, contradicciones y maravillas que esto implica. Y es que le apasiona narrar historias de mujeres rebeldes que, como ella misma hace, no siguen los estándares, sino que los retan y rompen. “Me divierto al dar vida a mujeres que, a su vez, disfrutan interpretar distintos papeles en su historia, en especial cuando son irónicas o satíricas”, dijo a The Guardian. Algo que encontró en uno de sus mayores éxitos en pantalla, la película Gone Girl, que marcó un parteaguas en los proyectos que elige: “Me dio oportunidad de aprender de actuación como nunca antes. Me permitió mostrar todas las partes de una mujer. Ser extrema, peligrosa, dulce, complaciente, vulnerable. Fue la primera vez que pude alcanzar en el cine una libertad que antes sólo había sentido en los escenarios del teatro”. Al ver a Pike actuar vemos a mujeres reales que no buscan agradar al mundo, sino construir su historia a su gusto. “No sé si influyó en mí, pero crecí con Margaret Thatcher y la reina Isabel como las dos personas más poderosas en Inglaterra. Nadie las discutía. Eso debería ser lo normal. En cambio, ellas siguen siendo excepciones”, ha declarado sobre el poder que representan las mujeres. No por casualidad aceptó participar en Edith!, el podcast de ficción histórica que se estrenó a principios de 2021, donde interpreta a Edith Wilson, exprimera dama de Estados Unidos que gobernó aquel país cuando su esposo Woodrow Wilson tuvo un ictus severo en 1919. Ha sido la primera y única mujer en su cargo en asumir las funciones presidenciales y Rosamund no dudó en contar su historia, dándole la visibilidad que merece. Por fortuna, ella no sólo hace esto en la ficción. En su día a día, es una mujer que no busca complacer a nadie y eso nos fascina de ella.

“Creo que cuando tienes hijos es fácil decir que no a ciertas cosas; sin embargo, nunca te arrepentirás de decir que sí. Ese es nuestro lema en la vida (como familia) en este momento. Porque nunca miras al pasado lamentando a lo que dijiste que no”.

“Me encantaría decir que tengo un plan de vida. Pero sólo sé que quiero actuar toda mi vida”.

SEPTIEMBRE 2021

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2021-09-13T07:00:00.0000000Z

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