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LA NUEVA CHARLENE

La princesa de Mónaco deja los estigmas atrás y actualmente se luce como madre, esposa y filántropa por medio de su fundación.

POR SANDRA MENESES MORALES

La leyenda narra que, a pesar de ser bellísima y protagonista de una boda maravillosa en julio de 2011, Charlene de Mónaco era “la novia más triste de la realeza”. Sus lágrimas y su gesto melancólico, así como la seriedad del novio ese día, dieron paso a un sinfín de rumores. Se dijo que intentó ‘escapar’ de Mónaco poco antes del enlace con el príncipe Alberto; también que firmó un contrato prenupcial que la ataba cinco años a él, con heredero de por medio. El peor comentario aseguraba que ella no era feliz. Sin embargo, desde hace unos años, Charlene comenzó a lucir diferente; se le empezó a ver más en los eventos del principado y no con el gesto serio que tenía antes, sino afable y, sí, sonriente de nuevo.

Parece que tuvo que transcurrir casi una década para que esta princesa tuviera su final de ensueño, con un par de gemelos preciosos y traviesos, y con un marido modelo.

DOS MOTIVOS PARA SER FELIZ

Ha pasado mucho más que cinco años desde el supuesto contrato prenupcial y Charlene luce hoy, a sus 43 años, feliz y muy cercana a su esposo. Un hecho que tiene fecha probable de inicio: el 10 de diciembre de 2014, cuando nacieron sus gemelitos, Gabriella y Jacques. Se dice que los hijos estabilizan a algunas parejas; en el caso de Charlene y Alberto esto sucedió desde poco antes, a pesar de las murmuraciones, ya que así como había imágenes que la mostraban seria, había una proporción similar en las que lucía contenta, todo dependía del ángulo que los medios querían mostrar de ella.

Gabriella y Jacques vinieron a revolucionar a la princesa de Mónaco, no hay duda. Es algo que le puede suceder a cualquier madre, pero en ella toma otro ángulo porque poco después de su boda, los medios de comunicación comenzaron a mencionar su ausencia en eventos al lado de Alberto. Se especulaba sobre una mala relación entre ellos, pero el tiempo ha pasado y la llegada de sus hijos, así como una mayor presencia de ella, han disipado los rumores.

“Alberto es el hombre que amo, de lo contrario no sería su esposa. No quiero dar la imagen de una princesa de cuento, como algunos quieren imaginar. Mi única

ambición es ser eficaz, junto a mi esposo, para aquellos a quienes quiero ayudar”, dijo al diario francés Nice Matin.

Polémicas aparte, la realidad es que como todas las royals de primera línea, ella tiene su propia agenda. Por ejemplo, hace unas semanas estuvo en Sudáfrica, su país, en una campaña de conservación de la fauna, mientras Alberto cuidaba a los niños en el Gran Premio de Mónaco. “Él adora cada instante que pasa con sus hijos… son el amor de su vida”, dijo la princesa el pasado enero a Point de Vue. Platicó que los niños se divierten con él porque tiene mucho humor, aunque aclaró que el estricto es él a la hora de la disciplina.

Charlene también nos deja asomarnos a su vida familiar a través de su Instagram y el de su fundación. Desde hace unos años que abrió sus cuentas, sus hijos son los protagonistas absolutos, aunque también su esposo ha hecho apariciones, pocas, pero convincentes, como ésta de 2020 por el Día del Padre: “Si Alberto I era el explorador y el príncipe Rainiero III, el constructor; Alberto II es el príncipe de corazones... de mi corazón”, expresó ella.

EN DEFENSA DE SU AMOR

El encabezado de Point de Vue no deja lugar a dudas: “Estoy al mil por ciento con mi marido”. Una vez más, Charlene salía a defender su cuestionada relación con Alberto. Relajada, a punto de cumplir 10 años de casada y poco más de 20 de conocerlo, la princesa de Mónaco reveló que su

“Suceda lo que suceda, pase lo que pase, estoy al mil por ciento contigo… Te apoyaré sin importar lo que hagas”.

amor y admiración están con él: “No hay nadie más entregado a su país, más leal, determinado y valiente. No he visto a nadie trabajar más que él… Se interesa por todas las culturas y las respeta, tiene buen corazón y no juzga, sabe perdonar. Le tengo el mayor respeto”, comentó.

La princesa dice que al contarle sus problemas como jefe de Estado, ella lo reconforta diciéndole que estará con él en los buenos y los malos momentos. Y asegura que lo apoya porque, antes de casarse, Alberto fue su amigo, su guía y la protegió cuando ella se instaló en el principado y tuvo que adaptarse a un modo de vida diferente al que había tenido como campeona de nado: “Aprendí escuchando, observando, pero eres sobre todo tú el que me has ayudado y mostrado el camino. Siempre estaré a tu lado, te protegeré”. Hay que recordar que Charlene representó a Sudáfrica en competencias internacionales, como los Juegos Olímpicos, en los que con el equipo de relevos quedó en quinto lugar en 2000; y también que gracias a eso conoció a Alberto, en un encuentro de natación en Mónaco ese mismo año.

“Suceda lo que suceda, pase lo pase, estoy al mil por ciento contigo… Te apoyaré sin importar lo que hagas, tanto en los buenos como en los malos momentos”, remata Charlene en la mencionada entrevista. Y aunque medios como El País señalan que sabe representar muy bien su rol institucional, es innegable que con el paso de los años ella ha sabido mantener a raya los rumores más disparatados acerca de su relación con su esposo.

OTRAS PRIORIDADES

Laweb de la casa real de Mónaco muestra las actividades a las que la royal dedica su tiempo como primera dama del principado, desde su vínculo con la Fundación Nelson Mandela hasta la propia: la Fundación Princesa Charlene de Mónaco, que promueve la educación por medio del deporte desde su creación en 2012 y que opera en el país, en Estados Unidos y en Sudáfrica.

“Haría todo lo que hago ahora, aunque no tuviera el título (de princesa). Ayudar a la gente y tratar de educar a los demás. Mi tío es misionero y trabajó en Japón y Australia, y ahora está en Zambia. De hecho, viajé dos veces con él para ayudarle a restaurar una escuela local. Me gusta ayudar donde puedo”, dijo en 2019 a Huisgenoot.

El enfoque filantrópico de la princesa está en los niños y el deporte. Desde 2011 es copatrocinadora de Giving Organisation Trust, que se ocupa de cuestiones que van desde el sida entre los niños desfavorecidos hasta la protección del ambiente en Sudáfrica.

Es importante destacar que su apoyo no se circunscribe a su país natal y al adoptivo, pues en mayo se anunció que su fundación apoya la creación de una escuela de rugby en Ecuador. “El objetivo de la escuela es utilizar el deporte como un medio para comunicar todos estos valores diferentes a los niños de entornos desfavorecidos”, se informó en un comunicado. Y para ella el deporte sigue siendo esencial en lo privado, es una actividad que la hace sonreír y la muestra como una princesa competitiva, ejemplo de ello

“El pasado de Alberto no me pertenece… si él fuera de otro modo, yo no sería su esposa”.

es que hace unos meses ganó una competencia en bicicleta acuática; una travesía de 24 horas en la que recorrió 180 kilómetros que separan a las islas del principado de la isla de Córcega.

HACIA EL FUTURO

En los últimos años, Charlene ha derrumbado la leyenda de la princesa triste, que muchos medios publicaron basados en su poca presencia pública junto a su esposo, al inicio de su matrimonio; quizá no eran tantas apariciones como el mundo esperaba, pero sí como sus respectivas agendas lo permitían. Además, se difundían menos las imágenes de ella plena y sonriendo. “La gente es rápida para decir: ‘Oh, ¿por qué no sonríe en las fotos?’. Bueno, a veces es difícil hacerlo. No saben lo que ocurre en el fondo”. Es un hecho que en los recientes años sí se les ve más tiempo juntos a Charlene y a Alberto, y que ella, pacientemente, ha seguido desmintiendo en algunos medios los viejos rumores de una vida infeliz: “Hay momentos más o menos fáciles, como le sucede a todos en este mundo. Pero me siento feliz tal como soy, colmada con lo que vivo, sé que soy muy privilegiada”, expresó hace poco.

Si después de esto el mundo sigue pensando que su matrimonio es una farsa y que todo lo que los príncipes de Mónaco hacen es parte de una campaña para mostrarlos felices y no en su ‘triste’ realidad, entonces es justo decir que es un éxito y que ella luce como la eterna novia enamorada.

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2021-06-14T07:00:00.0000000Z

2021-06-14T07:00:00.0000000Z

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