¡REGRESÓ A CASA!

Después de 11 años, MICHELLE VVIETH volvió a Televisa para participarp en Las EsTrELLasbbaILanEnHoy, y espera nueva oportunidad en las telenovelast

Pasó más de una década paraa que Michelle Vieth regresara a Televisa, la empresa en la que dio sus primeros pasos como artista y que la convirtió en uno de los rostros más conocidos de los melodramas juveni-les a finales de los 90. Ahora, la “pequeña traviesa” está feliz conn su participación en el realityLass estrellasbailanenHoy, haciendo pareja con Emir Pabón y deddicándole el proyecto a su padre,, Dennis Vieth, quien falleciera trágicamente en septiembre paasado. Con la emoción a millón, Michelle nos comparte cómo vive esta mágica experiencia.

“LLEGA UN MOMENTO EN EL QUE ME FALTA EL AIREAIRE” ¿ Cuántos años fueron lejoss de Televisa?

Desde el 2010. Pasaron 11 años desde entonces. Ahora estoy contenta, agradecida con estaa nueva experiencia, este gran re-r greso a mi casa, donde me desscubrieron, donde me dieronmmi primera oportunidad.

¿Por qué tanto tiempo?

No sé, yo creo que la vida passa, se vienen otros proyectos, fui mamám cuatro veces, entonces, estabba un poco ocupada también conmmis niños; ahorita ya están más gran-g des, y estoy contenta de expplorar esta nueva etapa. Tengo un grang compañero, es alguien que me incita, me reta, me anima a seguir, sobre todo, me cobijja mucho. Ustedes no se dieeron cuenta, pero él siemppre es muy perfeccionista, iguali que yo, y aunque me sentí un poquito mal, hay que reponerse, seguir adelante, darlo todo, porque aquí no hay pretextos.

¿Ha sido complicado trabajar con los protocolos de salud que ahora impone la pandemia?

Claro. El simple hecho de ensayar bailando con el tapabocas puesto, híjole, me sofoco, me privo y no puedo, pues llega un momento en el que me falta el aire y viene la descompensación. Al final, no es el mismo esfuerzo físico, nos cansamos más, pero es parte del nuevo sistema. Debemos echarnos alcohol a cada rato, antibacterial, no nos tocamos la cara, y por respeto a mi compañero, Emir Pabón, que tiene a su mujer embarazada y será papá primerizo, marcamos la sana distancia, tenemos el menor contacto posible, hay menos cargadas, porque son tiempos extraordinarios y debemos tener soluciones extraordinarias.

¿Tú siempre has bailado?

No. A mí me gusta, pero no soy una bailarina profesional. Me encanta bailar, aunque hay cosas que se me complican.

¿Cuál es el género que más te gusta para bailar?

Me gusta mucho elrock androll, la quebradita, el vals, el tango... Es que mi abuelo me enseñó a bailar todos los clásicos. Yo creo que todos los ritmos son padres, cada uno tiene una técnica y merecen un respeto. Siento que hay que ir aprendiendo día a día, pues al principio no sabía quién iba a ser mi pareja, montamos

una coreografía, luego se cambió... me querían volver loca (risas).

¿Ya habías ensayado con Arath?

No, yo no había ensayado con nadie. No sabía quién iba a ser mi pareja. Yo ensayé algunos pasos sola para adelantarme un poquito, pero al final, eso tampoco se usó.

Enfrentaste un 2020 muy difícil, con la muerte de tu papá, ¿te ha servido este proyecto para drenar el dolor?

Estoy en un proceso, obviamente estoy viviendo mi duelo, mi papá está conmigo y me acompaña desde allá arriba. La verdad es que seguirá el proceso, cada quien tiene distintas maneras de vivirlo; yo lo único que siento es que mi papi está cuidándome y a él le dedico todo mi esfuerzo, todo mi amor, porque es mi angelito de la guarda.

“DECIDÍ VOLVER A MIS RAÍCES” En redes sociales están felices con tu regreso a Televisa y ya quieren que hagas telenovelas…

Sí, el público pide que conduzca, que haga telenovelas. Sólo les digo que esperen que termine este proyecto para ver qué hacemos.

¿Te gustaría volver a los melodramas?

Estaría encantada. Sin embargo, creo que las telenovelas de ahora son muy diferentes a las de antes. Esta es una época distinta, ya no son las producciones que duraban nueve meses y pasábamos más de un año grabando. Entonces, sería una gran experiencia, como desaprender lo aprendido y volver a aprender, porque la televisión es otra.

¿Harías una buena o una mala?

Cualquiera de las dos. ¡No me limiten! (risas).

¿Dónde has pasado estos meses de pandemia?

Me fui a Acapulco con mi familia, allá tengo un abuelo que tiene 86 años y una abuela que tiene 83; decidí regresar a mis raíces, me fui a cuidar a las personas que amo, valoré esos meses porque disfruté ver cómo crecían mis hijos en el mismo lugar en el que crecimos yo, mi mamá y mis abuelos.