CAMBIOS

Tal vez la única constante en la vida es el cambio. Y tanto en la vida como en los viajes, el cambio siempre viene con aprendizajes: personales, viajeros, sociales y hasta del destino.

El Pacífico colombiano es una muestra de ello. Hoy busca aprender del pasado de los afrodesendientes, con su cultura y tradiciones, que perduran en destinos desconocidos que hoy se abren al turismo responsable mediante la inclusión y el respeto a la naturaleza.

El Sur profundo de Estados

Unidos es otra región otrora conocida por su pasado esclavista y segregacionista, que hoy busca cambiar a una faceta con lo mejor de sus ciudades multiculturales.

Esto incluye a todas las minorías que lograron florecer pese a las adversidades y que ahora enriquecen la escena local sin olvidar su pasado, pero con los ojos bien puestos en un futuro igualitario. Tal vez, la única característica que esta región estadounidense quiere preservar sea su hospitalidad y amabilidad sureña.

Por otro lado, hay destinos que buscan evitar modificar su telón de fondo, en medida de lo posible: Islandia. Su escarpada geografía ha cambiado poco con el paso del tiempo, pero hoy esta permanencia está cada vez más amenazada por el cambio climático y nuestro impacto.

Viajar es crecer y cambiar, adaptarse, pero también reconocer que a veces hay cosas que no deberían modificarse, mucho menos con nuestra intervención. Busquemos que los cambios siempre sean para bien. Gracias por leer Traveler.

Viajar es crecer y cambiar, adaptarse, pero también reconocer que a veces hay cosas que no deberían modificarse.