Egipto y China: innovación tecnológica
2023-05-01T07:00:00.0000000Z
2023-05-01T07:00:00.0000000Z
Editorial Televisa

https://editorialtelevisa.pressreader.com/article/282638921877974
Sumario
La Piedra Rosetta de la escritura cuneiforme es la Inscripción de Behistún (Irán), tallada durante el reinado del monarca persa Darío I (522-486 a. C.). En ella se exhiben textos idénticos en los tres lenguajes oficiales del Imperio: el persa antiguo, el elamita y el babilonio. El británico Henry Creswicke Rawlinson compiló y tradujo algunos textos de la roca de Behistún, aunque el primero en descifrar los escritos cuneiformes del persa antiguo fue el alemán Georg Friedrich Grotefend. Al mismo tiempo que los sumerios prosperaban en Mesopotamia, el faraón Keops patrocinó el monumento más grande y elegante de Egipto, la Gran Pirámide de Guiza, que abarca una superficie de más de cinco hectáreas. Fue construida en la primera mitad del siglo XXVI a. C. con más de dos millones de bloques de piedra, cada uno de los cuales pesa por término medio más de una tonelada. Pese a su enorme tamaño, la pirámide se alineó y se orientó con absoluta precisión hacia el norte geográfico. La capacidad constructiva de los egipcios demuestra sus habilidades para fabricar instrumentos capaces de trabajar la piedra y sus amplios conocimientos en los sistemas de arrastre de grandes bloques y de polea para levantarlos y situarlos en los lugares precisos. Pero si hubo un pueblo en la antigüedad realmente dotado para los avances tecnológicos ese fue el chino. Fueron ellos los que idearon el primer arado de hierro en el siglo IV a. C. y, dos siglos después, desarrollaron el cultivo en surcos y la agricultura intensiva (los europeos no lo hicieron hasta el siglo XVII). Sus avances en la fundición del hierro fueron decisivos para dar ese impresionante salto hacia delante. Cuando comenzaron a mejorar dichas técnicas, obteniendo hierro fundido maleable (no quebradizo), pudieron fabricar arados mucho más complejos y resistentes. Y todo ello lo lograron, como muy tarde, hace unos 2,300 años.
es-mx