Mi lista

En la mañana. No soy un early bird porque generalmente me voy a dormir tarde y a menos que tenga alguna reunión o fitting a primera hora, suelo despertarme a las 9 de la mañana. Para mí, tener tiempo para desayunar es muy importante. Es mi comida favorita del día ya que me prepara para días intensos. Soy vegetariano y no tomo gluten desde hace 10 años, por esta razón nunca faltan en mi mesa avena, frutos secos, leches vegetales y plátano de Canarias. Al llegar al

trabajo. Cada día es diferente, hay temporadas en las que tengo que tener una presencia más física en el taller. Las relaciones públicas con clientas y clientas potenciales, proveedores y prensa me exigen también pasar mucho tiempo fuera del atelier, tanto en Madrid como en el extranjero. Por eso en mi casa siempre dispongo de espacio extra para trabajar de una manera más íntima, siendo la madrugada el momento que me permite dedicarme intensamente a mi labor creativa. A medio día. Aunque no se me da mal la cocina, cada vez tengo menos tiempo y debido a mi dieta la oferta se limita. Pero por suerte Madrid es una gran capital gastronómica y entre mis lugares favoritos están MUDRÁ –del chef Matthew Kenney– y Avocado Love, ambos plant

based, y Barganzo, de cocina tradicional israelí. En la tarde. Es el momento perfecto para tomar té o café con clientas o amigas. Nuestro servicio es completamente personalizado y nuestra meta es crear piezas que sean casi un talismán para nuestras clientas. Es por ello que compartir tiempo con ellas y conocerlas en profundidad es una parte vital de nuestro trabajo. Suelo continuar con mi jornada laboral hasta las 19:00 aproximadamente, momento que dedico, sin excusas, a entrenar a diario en el gimnasio durante una hora y media. Al caer la

noche. Llega el momento de atender la vida social, ya sea como invitado o estando pendiente de las celebridades que lucirán mis creaciones en los eventos. Cuando puedo quedarme una noche en casa mi plan favorito es escuchar música (me encanta la música de fusión folk contemporánea , especialmente toda la que viene de la región de Oriente Medio, Turquía, Israel…) y a la luz de una vela en compañía de Mateo, mi carlino. Bocetar los figurines de mis nuevas colecciones es y será siempre una de mis grandes pasiones y es en la intimidad de mi casa y en la tranquilidad de la noche en la que más cómodo me siento para dar rienda suelta a mi creatividad. Sin embargo también me nutro de la energía efervescente del centro de la ciudad y por ello acabo de instalarme en un apartamento en la renovada Plaza de Canalejas. n