Visión 2022

Hay que confesar que Google Glass era una broma pero Big Tech le sigue apostando a las gafas inteligentes.

EN ALGÚN MOMENTO A PRINCIPIOS DEL 2013, unas cuantas personas podían ser vistas en las calles de California usando un nuevo dispositivo que se veía como una cruza entre un par de lentes de plástico y un visor al estilo Cíclope de los X-Men. Era el prototipo de un nuevo lanzamiento de Google, Project Glass. En ese año se lanzaron al público, las gafas inteligentes que costaban 1,500 dólares, y que estaban compuestas de una pequeña pantalla montada en unos lentes flexibles que traían incorporada una cámara, un micrófono y una computadora. Y al igual que un celular de Google, podían ser activados con tu voz, usando el comando “Ok, Glass…”

Algunos visionarios predijeron que la habilidad de tomar fotografías, revisar tu correo o comenzar a grabar un video sin tener que sacar tu celular sería algo revolucionario. Otros dijeron que las personas se convertirían en un chiste andando. Los pesimistas ganaron, sin lugar a duda. Se prohibieron en todos los lugares, desde cines hasta vestidores, Google Glass se convirtió en un chiste tan grande que incluso la propia empresa lanzó un video con una parodia de las gafas. Y, siendo honestos, sí eran un poco ridículos...

Sin embargo, Big Tech no estaba decidido a dejar ir este concepto. Apple, Microsoft, Xiaomi y al menos dos docenas de otras empresas, dicen estar trabajando en el desarrollo de unas gafas que tengan algún tipo de conectividad/ capacidad de IA, aclarando que el 2022 será el año en que las gafas inteligentes lleguen a las masas.

Por un lado, puede que te preguntes por qué se convirtieron en un chiste. La popularidad de otros dispositivos inteligentes está por los cielos. Las ventas a nivel mundial de los cascos de RV suman más de 6.1 millones de unidades tan solo en 2021. El Apple Watch, que no fue tan apreciado cuando se lanzó en el 2015, ahora vende más piezas que la industria relojera suiza.

Los analistas prevén que el mercado de la tecnología portable en ropa valdrá hasta 64 mil millones de dólares para el 2024. Incluso Google no ha abandonado por completo a los Google Glass: una nueva interpretación, Glass Enterprise Edition, está enfocada en profesionales serios y ambiciosos que requieren acceso con comandos de voces para las plantas de ensamblaje, centrales eléctricas y quirófanos.

Y por otro lado, ¿la última década realmente nos ha hecho sentir más cómodos con la presencia de las prendas inteligentes que ahora nos sentiremos más felices usándolos en nuestros rostros y en público?

En el 2013, uno de los comentarios que recibió Google Glass fue “Háganlos ver más cool… como un par de Ray-Bans”. En el 2021, Facebook realizó una colaboración con la compañía de gafas solares para hacerlo una realidad. El producto resultante, los Ray-Ban Stories, eran casi indistinguibles de un par de Wayfarers, pero podías tomar llamadas, fotos y grabar videos.

El objetivo de Facebook está sin lugar a dudas relacionado con su Metaverso o Meta, la “siguiente evolución de conexiones sociales”, convirtiendo a los lentes inteligentes en una puerta de acceso a un universo completamente digital frente a nuestros ojos, capaz de transportarnos a un juego de realidad virtual o fusionando las navegaciones, para vernos como Tom Cruise en RiskyBusiness.

En otra parte del mundo, la marca chino americana Lenovo ha anunciado sus gafas ThinkReality A3, que se conectan a computadoras y dispositivos Motorola. Estos permiten al usuario ver varias pantallas virtuales al mismo tiempo e interactuar con sus amigos o compañeros usando un micrófono. Como una llamada de Zoom de la que no puedes escapar.

Las gafas inteligentes también están siendo puestas a prueba para las compras online y descubrir cómo un mueble se vería en nuestras casas. Ikea hizo una alianza con HoloLens de Microsoft para que sus clientes pudieran diseñar una cocina o remodelar su comedor sin sacar una cinta métrica. Por 3,000 libras podías conseguir un par de lentes con un peso de 556 gramos, y las aplicaciones de HoloLens parecen estar destinadas para solo uso comercial, al menos por ahora.

Nada de esto suena lo suficientemente sexy. Si las gafas inteligentes van a convertirse en el mejor producto del mercado, puede que solo una empresa pueda conseguirlo: Apple. ¿Podrá renovar la imagen de la tecnología para crear un kit que demuestre ser irresistible, como lo hizo con el iPod a partir de un reproductor MP3 o con su Apple Watch a partir de los dispositivos fitness?

En diciembre, se publicó un artículo titulado Ha llegado el momento del sucesor del Iphone de Apple, en The Wall Street Journal, el cual decía que el primer dispositivo de realidad aumentada sería anunciado para finales del 2022. En el texto se mostraba un boceto del “dispositivo para la cabeza”, un par de gafas enormes estilo sci-fi y con una enorme y brillante manzana visible al costado izquierdo. De solo verlo ya querías que fuera tuyo.

Superar el reto cultural de persuadir a la gente de usar una computadora en sus rostros es un verdadero desafío. Pero hasta hace poco, millones de personas se habían negado a usar un reloj, utilizando su teléfono para saber la hora. Se necesito de una empresa telefónica para convencerlos de que necesitaban ambos.

Hoy en día, el mercado de los dispositivos de realidad virtual sigue siendo relativamente pequeño. Pero el mercado de los lentes vale aproximadamente 140 mil millones de dólares por año. Por experiencia sabemos que definitivamente Apple tiene puesta la mirada en ellos.