Televisa Kiosco Digital

Ana Valeria Becerril

Este mes podemos verla no solo en pantalla en Cómo matar a mamá, también en el escenario del Foro Lucerna en

Las Lobas. Con tantos proyectos, su carrera va en ascenso y no parece tener tiempo libre, aunque confiesa que siempre encuentra un momento para sus seres queridos.

En algún instante consideraste estudiar Antropología, ¿cómo decidiste la actuación?

Lo elegí ya sobre un escenario. Empecé a hacer teatro independiente, universitario, en foros muy chiquitos de la CDMX, y lo veía un poco como un hobby porque siempre se me había dicho que de teatro, uno no vivía. También tenía esta pasión por la historia, la antropología, todo lo social y me parecían –y hasta la fecha– dos carreras que pueden converger muy bien, así que dije: “Bueno, me gusta actuar, pero también quisiera una vida universitaria”. Aunque ya sobre el escenario pensé: “No, esto es lo que me apasiona, es a donde quiero llegar todos los días a trabajar y es lo que busco para mí”.

¿Cómo fue tu primer acercamiento al teatro?

En secundaria y prepa estaba en el taller de teatro porque creía que era la única materia en la que me iba bien, porque no era particularmente buena estudiante, y creía que una materia donde me pusieran 10 por jugar es increíble. Mi maestra entonces era una dramaturga teatral increíble que, tras varios años más, me comentó de un proyecto para el cual necesitaba a una niña que le ayudara... y de ahí, me “secuestro” el teatro y ya no volví a salir de ahí.

¿Qué sientes cuando estás en un escenario?

Es una sensación muy bonita que también experimento en un set. Siempre es la misma sensación de nervios, pero expectativa. Es como cuando subes a una montaña rusa y estás a punto de caer por la pendiente más alta: te encanta y sabes que será divertido, y que cuando llegues al final tendrás la mejor experiencia. Me sigue emocionando como el primer día y siento que, cuando no sea así, es porque ya no me tendré que dedicar a esto.

¿El teatro es más retador por ser en vivo?

No es que sea más difícil una que otra disciplina, cada una tiene sus complejidades vastas, pero pienso que el teatro, escuché a un compañero mío decir esto, es como el gimnasio: ahí vas a entrenar tus recursos como actor, y ya en el set llegas a resolver y ser más práctico. Algo que me gusta del teatro es justo que puedes entrenar tu músculo de actor y experimentar, y los tiempos son distintos para explorar otras cosas.

¿Qué disfrutas más de tu carrera?

Siempre me he considerado una ñoña para la creación del personaje y meterme de verdad a descubrir su pasado, de dónde vino, para entender el carácter y personalidad que tiene ahora para tomar decisiones que necesite cada personaje. Lo que más me gusta es el trabajo previo, el de mesa: lo veo como una investigadora de la vida de alguien más y eso me encanta.

Estás por estrenar Cómo matar a mamá, cuéntame sobre esta película...

Se estrena el 10 de mayo y siento que será especial y simbólico. Es la historia de tres hermanas muy unidas entre ellas, con una relación muy linda. Cada una está cargando un dilema de ser una mujer joven e independiente y se topan con que su madre, con quien no tienen una gran relación, les dice que padece una enfermedad terminal y quiere acabar su vida, y para ello harán un road trip por toda Baja California para reconectar con su mamá, con el pasado de cada una, es de esos viajes que te cambian.

¿Tienes algo en común con este personaje?

Creo que ha sido el personaje más lejano a mí y, por ende, el más divertido de hacer. Es una mujer que, para empezar, es mayor que yo, tiene otra situación de vida, está casada, es madre, es empresaria y está en un dilema que, sin dar mucho spoiler, estoy lejos de pasar. Fue muy interesante entrarle a ese juego, al mundo de Teté y aparte con las compañeras increíbles que tuve a mi lado durante el rodaje.

Con esta agenda tan ocupada, ¿cómo balanceas tu vida personal y profesional?

Siempre he sido muy cuidadosa de mis relaciones, tampoco es que tenga un círculo social enorme (risas). La verdad, atesoro y cuido a la gente que tengo. Conforme he ido creciendo, he reflexionado en el valor de procurar a la gente que amas; no son tantas personas, pero es suficiente con saber que tengo la responsabilidad afectiva de esas relaciones y que me siento cuidada por ellas, y también ellas por mí.

¿Cuál es tu clave para una buena relación pareja, sobre todo teniendo una carrera tan demandante?

Tengo la fortuna de tener como compañero a alguien muy centrado que sabe qué quiere, con una individualidad muy fuerte, como la mía. Y lo que hemos hablado y encontrado es que mientras respetemos la individualidad de cada uno y busquemos espacios para formar equipo, para ser pareja y acompañarnos, aunque sin depender del otro, sin querer ocupar todos los espacios de la otra persona, ahí estará la clave de lo que a mí me ha funcionado al respecto.

Con las redes sociales, ahora los actores y otras personalidades pueden exponer una parte más personal. ¿Qué mensajes son importantes comunicar para ti?

Siento que hay una responsabilidad muy fuerte para todas las personas que tenemos cierto tipo de foro público con personas que están al pendiente de lo que queremos decir. No por eso creo que todos debamos tener LA postura política correcta y no haya margen para el error, el debate o el cambio de opinión. Pienso que todos estamos aprendiendo cómo funcionan las redes sociales y cómo se mueve la sociedad tan rápido, así que procuro informarme muy bien antes de expresar cualquier cosa y si no tengo nada que decir, no lo digo y ya. Procuro no poner cosas tan personales porque cuido mucho mis espacios y mi anonimato, hasta donde se pueda.

¿Cuál es tu percepción de la fama?

Siento que funciona para lo que necesita funcionar. En una sociedad actual es necesario e indispensable tener estas figuras, aunque para mí no era algo que busqué o que sea un objetivo para mi carrera. Siempre me decía que, si venía, pues bien y lo manejo de la mejor manera posible, cuidándome también a mí.

¿Qué objetivos siguen para ti, profesionalmente hablando?

Hacer lo más que pueda, hacer de todo. Me encantaría tener algún proyecto de época. Quiero lo más diverso y no quedarme con ganas de nada, decir: “Abarqué todo”.

OPEN MIND

es-mx

2023-05-01T07:00:00.0000000Z

2023-05-01T07:00:00.0000000Z

https://editorialtelevisa.pressreader.com/article/282291029527002

Editorial Televisa