¡A DÍAS DE CONOCER A MÁXIMO!

TANIA LIZARDO está con la emoción a mil por la próxima llegada de su primer bebé, y nos cuenta del mal que la aquejó en la dulce espera

En casa de Tania Lizardo y Patricio “Pato” Cordero ya está todo listo para recibir a Máximo, su primer bebé, quien está programado para nacer este 4 de diciembre, aunque como la actriz espera que sea parto natural todo puede suceder.

“Está todo preparado para que el parto sea en agua y natural, desde la semana 32 Máximo ya está volteado, no tiene vuelta de cordeón, está perfecto para que pueda salir así, ya sólo es esperar en el momento a ver qué pasa.

“El nacimiento será en una sala LPR (Labor-Parto-Recuperación) aquí en la Ciudad de México y pues ya tengo a mi ginecólogo, mi dula y mi pediatra”, nos contó la actriz vía telefónica.

“EL PESO ES ALGO POR LO QUE NO QUERÍA PREOCUPARME”

En la fecha del 4 de diciembre se cumplirían las 40 semanas de gestación del bebé, sin embargo, Tania piensa que quizás Máximo llegue antes.

“Estos últimos días se me han hecho eternos, pero en realidad el embarazo se me ha pasado muy rápido, pero estoy feliz, ya ahorita sí me duele hasta el pelo”, nos compartió entre risas.

Y es que aunque se la ha llevado muy tranquila, sin náuseas, sin mareos y yendo de un lado para otro, nos reveló una afección que la ha aquejado.

“Me dio una cosa que se llama tendosinovitis de Quervain, es cuando los tendones en las manos se atrapan por la circulación, por retención de líquidos, a algunas mamás les pasa, no a todas, y a mí me dio, entonces las manos se me duermen, me comenzó a partir de los siete meses, y de verdad no se lo deseo a nadie. Me duelen las manos y aparte están dormidas”, explicó.

De ahí en fuera, reiteró, le ha ido de maravilla y se ha dado licencia para comer todo lo que quiere, y ni si quiera ha querido saber cuánto subió de peso durante esta hermosa etapa.

“Le dije a mi ginecólogo: ‘Tú lleva el control del peso, si algo va mal, dímelo y me pongo a dieta’, pero es algo por lo que no quería preocuparme, entonces no sé ni cuánto peso, sé que mi bebé es muy grandote, hace unos días ya medía 47 cm y pesaba

3.2 kg, entonces yo creo que sí va a salir de unos

50 cm y pesando unos 3.5 kg, por eso me duele la espalda y luego yo pompona, más pompas se me hicieron”, detalló Tania.

“ALGO QUE TENGO QUE HACER LLEGANDO ES PRESENTARLE A LOS PERROS”

El futuro papá está feliz y ha estado viviendo todo el proceso junto a Tania, consintiéndola y se encargó nada menos que de comprar y elegir personalmente la primera prenda que usará Máximo: un mameluco color amarillo, que es una tradición para la buena suerte.

Y el día que llegue a casa el nuevo integrante de la familia, agregó Tania, domirá en colecho, que es la cunita que se pone al lado de la cama, pero antes de asentarlo en su aposento hay algo muy especial que tienen planeado para él.

“Algo que tengo que hacer llegando es presentarle a los perros en la puerta para que ellos no sientan que alguien los está invadiendo, es que con ellos es un tema, les he puescositas to llantos de bebé, que huelen al bebé, los acerco mupanza, cho, le dan besitos a la entonces como que van reconociendo

que hay algo que viene porque al final voy a tener mucha supervisión con ellos, pero no quiero aislarlos del bebé”, relató Tania.

Y ya instalados en casa, con todo y la mamá de Tania, que le estará ayudando en los primeros días, Tania y Pato comenzarán la aventura más grande de su vida.

Está todo preparado para que el parto sea en agua y natural”