ENCAPSULAR EL INFINITO

YAYOI KUSAMA (Matsumoto, Japón, 1929) se ha apoderado de la inmensidad. Hace 83 años optó por redefinir el infinito el día en que comenzó a pintar puntos. Su particular universo, psicodélico y colorista tiene más que ver con lo eterno que con lo efímero. Por eso, la artista japonesa ha intervenido algunas de las prendas y complementos más reconocibles de Louis Vuitton con el fin de crear una colección icónica. Las pinceladas de la princesa de los lunares llegan, por ejemplo, hasta la botella y el envase de L’Immensité. Trazos metalizados de diferentes tamaños y pintados en variados tipos de grises nos recuerdan que para entrar en la órbita de su obra bastaría solo con dejarse embriagar por esta célebre fragancia de la maison.